¡Atención!

Coria NO se hace responsable por daños morales, psicológicos o físicos (golpeadores pagados) que puedan provocar los textos. Cualquier similitud con algún hecho de la vida real, es pura coincidencia.
Ley N° 12786

martes, 19 de agosto de 2008

Voy a ser, voy a decir.

Hola, amigos!! Voy a contarles lo que se me ocurrió, que me pareció chistoso: voy a convertirme en segundos en un personaje, y a continuación, voy a pronunciar una frase que se puede escuchar de tal (pero la voy a escribir, igual, eh… no creo que me puedas escuchar). Así que empezamos con un clásico…:

Coria-nazi: “Ah, mirá vos… ¿y tus papás no te dicen nada por el pelo tan largo? Cortátelo y dejate de joder…”.

Coria-intelectual marxista:
“Tu ignorancia pequeñoburgués no deja de sorprender a mis neuronas”.

Coria-estudiante de filosofía chupamedias: “Sí, lo entiendo. De todos modos, Nietzsche en su libro ‘Así habló Zaratustra”, página 133, comenta que…”.

Coria-rollinga: “Ehhh, ratón, dejame pasá’… quiero ve’ a lo’ estoun’… eh, no te zarpé de bigote…”.

Coria-fanático de “El Señor de los Anillos”: “¡No sabés! ¡¡Va a salir la película en la que por fín los elfos recuperan la Espada de la Verdad, y van a Mordor a destruir el Diamante Hok, que era donde había nacido Sauron y los Nazgul!!”.

Coria-programador de computadoras: “¿Cuánto tenés de RAM? ¿Y los megahertz que me habías dicho? Te consigo una memoria de 4 gigas por kilosegundo…”.

Coria-Pare de sufrir: “Eu tein la copa de a verdad. Vocè poidei comprarla agora mismo”.

Coria-Rial: “Al parecer, cuando salió del estudio, la Tota Santillán recibió un mensaje amenazador, que decía: ‘Te voy a cortar como a un salame de Mendoza’. Es lo que me llegó a mí”.

Coria-portero: “¡¿Cómo anda, Don Atilio?!”

Coria-tío Ricky: “¡¡¡Ehhh, vamo’, armemo’ un karaokeeeeee!!!”

Coria-rubiecita modelo: “Ayy, sos RE grasa, gorda. Sabelo.”.

Coria-cheto: “Sí, la pasamos requete bien, ahí, en un restorán de Puerto Madero. Después nos fuimos para la casa de mis viejos… bah, la quinta que les compré, ¿te acordás?”

Coria-pendeja con plata: “La primera vez que fui a Disney… ah, no, la tercera fue… ¡me compré un guante de Mickey re lindo!”.

Coria-Calamaro: “¿Cómo estás hermano, fulano, con tu grano mengano, si tu pierdes, yo te gano…”.

Coria-Chávez: “¡¡¡Compañeros, latinoamericanos!!! Hay que destruir el imperialismo del Señor Caballerito del Norte.”.

Coria-referente del campo: “No, pero esta pingüina es una hija de puta. ¿Sabés cuánto sale un repuesto de tractor? ¡Y encima quiere subir las retenciones!”.

Coria-referente del gobierno: “La oligarquía más oligarca del país es la misma que hace 150 años. ¿O de quién te pensás que salen los apellidos Macri, Pérez Companc, eh? Apoyo las retenciones a morir… ¡viva Perón!”.

Coria-científico: “Lo que hacen los electrolitos es darle energía a los electrones que perdieron carga por haber isotopado el cloruro de nitrato.”.

Coria-defensor de De la Rúa: “Boludo, al menos el tipo se puso, intentó algo… no le salió, bueno, pero lo intentó.”.

Coria-fanático de Racing: “¡¡Ohhhhh, de Racin’… ohhhh, de Racin’… so’ de Racin’ y que se vayan todoo’!!

Coria-colectivero: “¿$0,90? ¿Hasta dónde viajás?”.

Coria-Coria: “¿Pasás por mi blog? Si querés, podés comentar…”.


Bueno, aquí llega el final de mi texto. Gracias por haber leído. Hubiese preferido seguir, pero se me acaba el tiempo, también el tuyo, y las ideas. Suerte, y gracias por haber pasado. Si querés, comentá… Jajaja.

Coria.

martes, 12 de agosto de 2008

Las misteriosas cartas que me tocó entregar

Queridos amigos, les confieso que me mandé una macana. Sin quererlo, o bueno, con plena intención, intervine en la conversación de dos personajes (se sabe, ahora estoy trabajando de cartero) realizada por carta. Simplemente, vean la historia (empezada, lamentablemente) que estos dos sujetos nos cuentan. La primera carta, era exactamente así. “Es”, porque la tengo bien guardada. Y no materialmente, sino en mi cabeza.


Querido Astro del día,

Te escribo con lágrimas en los ojos al saber que ya no voy a poder a salir a jugar con vos. Si la tinta está corrida o borrosa, podrás comprobar mi dolor, profundo y sonoro. Y más con la música de “Chanfle, el acústico” acompañándome. En fin, ¿podrías tú aclarar la situación? No puedo pensar ni creer siquiera en que lo último que te dije fue “Mañana nos veremos, alegres y bien vistos”. ¡Cómo supimos jugar de día y noche! Si nos habrá dolido el pecho de tanto reir. No se me ocurre pensar que no quieres jugar más conmigo, eso me devastaría. Aunque si lo decís, voy a creerte. Desalmado, fulminado y muerto, caeré al piso.

Sin más,

Te adora

Caballex.


Lo que respondió su amigo fue lo siguiente:


Estimado y amado Caballo intergaláctico,

No es que no quiera jugar contigo, no es que no te quiera, no es nuez. Simplemente, no me dan los tiempos. Perdón por haberte herido, pero dicen por ahí que quien sufre antes de tiempo, termina por disfrutar el futuro. Y tú me conoces, siempre creyente yo, y lo siento, es algo que jamás me vas a perdonar. En cuanto a lo de anoche, bueno, sí, el plan sigue firme: iremos a pasear y a divertirnos estando alegres. Pero no será el “mañana” de “aquella noche” en que me dijiste lo que reproduces en tu carta. Dejame decirte que extraño tanto como vos salir de día, noche y contranoche. Pero, te repito: ¡no me dan los tiempos! Además, hay algo que no te comenté… si quieres saber más, adjunta por favor el listón que sueles utilizar en las carreras al Obleisco Invertido. No es que no te crea, no es nuez, repito, es sólo que como te has estado juntando con esos humanos, bueno… los conocés como yo. Y no son del agrado de dos “extraños espaciales” como nosotros. ¿Entender?

Siempre tuyo,

Apolón, el Astro del día.

PD: Espero tu listón, recuerda.



Estos personajes seguirán mandándose cartas, lo aseguro. También me aseguro pecador, nunca debí haber intervenido en sus conversaciones. Pero por ahora, sólo conseguí leer estas dos. Espero conseguir más, y así poder compartirlas con ustedes.

Coria.

lunes, 14 de julio de 2008

Tío Ricky, nuestro fiestero tío.

Díganme que no, y los acuso de chamuyonguis. Díganme que no, y seguro no se juntan con sus tíos... en fin, el texto va a estar dedicado a ese tío, ese “padrino”, ese amigo de tu viejo o vieja que va a todas las zorras reuniones familiares. Ese que se pone a contar historias donde él siempre es un vivaracho. Ese que se pone en pedo en los cumpleaños de 15. Ese que decís: “Ayy, y te acordás cuando el Tío (su nombre) empezó a cantar, y...”. En fin, nuestro TIO, el Tío Ricky. (Aunque también existen variantes, como tío Coqui, tío Pelado, tío Pollo, tío Rama, etc...)
No sé por qué motivo, por qué causa... siempre hay una oveja negra en la familia. Una oveja jodona, una oveja fiestera... soltera, además. O con una mujer que le perdona TODO. Jaja, aguante. Ese chabón cuarenticincón que siempre que hay que bailar, baila, siempre que hay que cantar, ladra, ese mismo. Nunca faltan las reuniones donde dicen (ahora porque hay dvd’s de eso): “Hacemos un karaokeeeeeeee?!?!?!”. Y sí, hacemos. ¿Y qué del Tío Ricky? Sí, a la media hora de que todo el mundo (abuelas, tu vieja, tu hermano) hizo el ridículo, cae el Tío Ricky con una Quilmes encima, y empieza: “Esta la cantaba ya desde pibe, me acuerdooo...!!”, y continúa, pifiando la letra, obvio, el hijo de puta: “Siga el baile, siga el baile... eerehhhgnrsas-tamborín!! La cuhhmparsa de looouss neeeegrruuuhhh...!! Vamos todos!!”. Sí, encima la va de director. O sea, todo bien “Richard” (sí, porque también le dicen así, a veces...), pero guacho, das asco. Ok, nos hacés cagar de risa... pero ya!!
También es el tío que en los 15 no para de bailar... y el que se queda hasta el final de la fiesta las cosas que se robó del “Carnaval carioca”. O sea, ya te vimos con el gorro de Aladin con la pluma. Nos sacamos fotos, todo... basta un toque, sí? Deben pensar, a esta altura que estoy en contra... pero no. Sin mencionar sus intentos por ridiculizar al mago... ah, jaja, eso!! Tiene una especie de atracción hacia los magos. No sé, siempre lo toman a él... pobre, le queman la mano, le pinchan el culo (Qué?! Ni que me lo hubieran hecho!!), y le prenden fuego la guita; que, a propósito, dice: “$100?! No tengo, estoy seco...”, cuando en realidad, tiene como 5. Además, poco disimulado: “Míos?! Quememos unos tuyos!!”, y de fondo, la risa de todos “Hajejeje...”, tipo falseada, pero con algo de verdad. Ayy, tío...
Lo que juega muchos puntos a favor es que no tiene vergüenza de nada... por eso saca a bailar a toda la gente que nadie quiere (abuelas, tías lejanas, amigas de tus abuelas), y LA PASA BIEN!! No sé cómo hará... a mí me dá vergüenza el sólo hecho de que mi vieja piense en bailar. Grrrr... tuve un escalofrío.
Qué autos usa? Y... generalmente usa autos medianamente buenos, como Sienas o Méganes... y los colores son de esos verdes oscuros, bordós... esos! Y maneja puteando a todos... creyéndose Meteoro. Ah, porque le re caben los autos, y en cada reunión te cuenta cómo fue la carrera anterior... Y es el típico chabón que cuando era pibito y andaba en bicicleta hacía el ruido de los motores de los autos de TC. Lo veias ( o bueh, te cuenta tu abuela) que iba en la bicicleta y hacía: “WWWuuuuaaammmbbbbambaaaammmmbambaaamm!!!!”. Ni que pareciera el ruido original, no, pero... me entienden.
Además, es el típico flaco que sabe hacer varias cosas, menos jugar a la pelota. Ponele, vas a una quinta y lo vés al chabón arreglando algo, limpiando la pileta, haciendo el asado, que te dice: “Uhhhh, esto está...!! PUNTO CARAMELO!!”. Puro corazón, Ricky! Amigazo! Y con respecto al fútbol, sí, bueno... siempre ataja, obvio. Porque es un queso que sirve para relatar el partido, y decir giladas graciosas... también es el que siempre llega tarde a cada palo, hecho con buzos. Cae en cámara lenta, y para el palo que no tenía que ir. Un grande.
Por cierto, tiene buena memoria Ricky... recuerden eso. Siempre se acuerda de cómo era la casa. Ponele, dicen “Sí, porque los chicos jugaban en el patio (refiriéndose a él y a tu viejo).”, y Ricky dice: “Sí, yo me acuerdo que donde ahora es el patio estaba la pieza de papá y mamá, te acordás? Que para ir pasabas por el pasillo, que estaba donde ahora está el baño.”. O sea, cómo te acordás, WWWacho?!
Y si te va mal en el colegio, lo heredaste de él. “Ayy, no, tu papá era un alumno 10 en el colegio... pero tu tíooo!!! Ayy, me volvía loca...”, para continuar con carcajadas de todos. “Sí, me acuerdo que me llevaba 4 por año...”, y empieza a contar cómo lo castigaban, con las reglas, bueh, ya sabemos...
Uhhhh, las historias de fantasmas que tiene en forro!!! Obvio, de mentira, porque le cabe chamuyar... no sé por qué, Ricky. Sos grosso igual, sin mentir... jaja. Siempre dice haber visto un OVNI, una pendeja con vestido blanco, etc... Sí, con un vodka encima, quién no vé fantasmas, Rick?!
En fin... yo por ahí estoy hablando de todo esto... y en un futuro me convierta en tío... “Cori”.

Gracias por leer,

Coria.